Entrevistamos a Tigrenator en un intento desesperado de valorar nuestro trabajo
Regalar tu trabajo es una de las cosas más fáciles del mundo: un favor a una tía, una asesoría a mitad de café, un acuerdo a un sueldo que no cubre ni tus megas y un sacrificio de seis meses para “ganar currículum”.
Acostumbramos a disfrazar el trabajo de “favores” y a aceptar menos de lo que realmente valemos solo porque somos una generación con muchas ansias por crear; y que además hemos saltado de crisis económica a crisis económica, tiene sus efectos secundarios.
Sobre todo cuando en plena disyuntiva, el precio de tu trabajo lo tienes que poner tú.
Es por eso que devoramos artículos laborales, opiniones de allegados con experiencia, vemos repetidamente TED Talks y leemos a uno que otro experto con mejores recomendaciones que el primo “emprendedor”.
Y en los mejores casos, nos encontramos con guías como Tigrenator; un emprendimiento cuya misión es “orientar a quienes ofrecen servicios creativos para la apropiada valoración de su trabajo”.
En un intento desesperado de sobrevivir en el mundo freelance, contactamos a Helen Hernández, generadora de contenido de Tigrenator, para preguntarle todas nuestras dudas de novatas.
Sabemos que empezar a trabajar en modo freelance puede sonar extremadamente arriesgado. Lo bueno es que tenemos la opción de empezar a hacerlo gradualmente y justo esto sería el consejo principal que les daríamos. Den pequeños pasos mientras aún mantienen su trabajo fijo.
No es fácil al principio, pero debemos mantenernos enfocados y totalmente perseverantes. Recordemos que ahora todo se tratará de nosotros, debemos cumplir todos los roles y mantener la organización al máximo.
No intenten empezar sin tener un plan de acción, asegurense de tener todo preparado; área en la que vas a desenvolverte definida, portafolio, ¿cuál será tu método de cobro?, establece objetivos a corto y mediano plazo y no olvides que la clave principal es la paciencia.
¿Cuáles son los mandamientos de todo freelancer?
No hay mandamientos en este mundo del freelance, cada quien debe trabajar a su manera, siempre desde lo que dicta el sentido común y el respeto a los otros profesionales, el cliente e inclusive a uno mismo.
Si hay ciertas reglas que pueden ayudarnos a trabajar mejor como freelancers pero lo cierto es que no siempre a todos nos funcionan las mismas cosas. Debemos inventarnos y reinventarnos cada día. Experimentar y buscar la mejor manera de formar nuestro éxito.
Recordando todo el esfuerzo, tiempo y dinero que hemos invertido en ser lo que somos profesionalmente. Así mismo conocer el esfuerzo que han hecho muchas personas antes que nosotros para consolidar estas profesiones y oficios.
¿Qué pasa cuando aceptamos menos de lo que realmente vale nuestro trabajo?
Esto es algo que no solo nos afecta a nosotros, también afecta a nuestros colegas. Con esto le estás diciendo a los demás “nuestro trabajo no significa nada”. Cuando un profesional de nuestro rubro cobre lo que realmente se debe cobrar no querrán tomarlo en serio porque otras personas se han encargado de desvalorizarlo y aceptar siempre menos. ¡No lo hagan, por favor! Vamos a ayudarnos.
Que tenemos mucho tiempo libre. Esto es totalmente falso. La verdad es que al trabajar solos debemos estar al tanto de muchos detalles, dedicarnos al máximo y cumplir muchos más roles.
Esto es algo que suele sucedernos muy seguido. Solo nos queda decir: ¡relajarse!
Definitivamente dejando que el cerebro trabaje en segundo plano y simplemente descanse. Lean un libro, escuchen música, salgan a caminar. Presionarnos de más no trae nada positivo y solo nos hunde más.
Y por último, ¿tres cosas que debemos recordar cuando trabajamos con clientes?
1. Trata de dar más de lo que el cliente espera en cuanto a calidad. 2. Establece una relación de confianza. 3. Pon claros los límites de tu relación con el cliente.